Ubicado en la parte oriente del área metropolitana de la ciudad de Zacatecas y Guadalupe. Se ubica el Club de Golf de Zacatecas que forma parte de la antigua ex-hacienda de Bernardez que data del año 1575 con un pasado ligado a la minería en la época colonial.
Actualmente el club de golf representa un pulmón verde para el área urbana de la zona y sobretodo, forma parte de un lenguaje visual en el cual el color verde, los pirules y su topografía accidentada, hacen que el predio general del fraccionamiento cautive a sus visitantes y residentes.
En esta propuesta arquitectónica, la principal intención del proyecto tiene que ver con una nueva reforma, una nueva imagen visual y estética así como una mejora en la operación del inmueble.
Entre los valores arquitectónicos que se quieren destacar en esta proposición espacial, tiene que ver con aspectos como la monumentalidad, generando un lenguaje arraigado a la arquitectura mexicana la cual siempre se ha sido distinguido por elementos, muros y recorridos de gran importancia y contundencia que generan espacios cálidos a la escala humana.
La relación al exterior y el vínculo entre el medio ambiente surge como otro valor fundamental en la concepción del esquema principal. En este desarrollo era fundamental jerarquizar y enfatizar las visuales naturales del terreno ya que el paisaje brinda un horizonte conformado por árboles de edad adulta y una topografía cautivante de la idiosincrasia zacatecana.
La adaptación al contexto y al edificio existente, fue una premisa inicial y contundente a la hora de generar esta nueva propuesta. En este caso, la estrategia de diseño implementada tuvo que ver con el respeto a los muros principales existentes y a partir de estos elementos, generar nuevos muros con doble función, generando una nueva imagen de arquitectura contemporánea que clarifique y limpie la volumetría del conjunto.
De igual manera, esta monumentalidad y limpieza por medio de muros, generan un énfasis en el acceso principal que propician una tensión espacial que aporta un ingreso a la casa club con un carácter más exclusivo. Este respeto por los ángulos originales y la geometría tensionada hacia el acceso, permite un oportunidad de generar una plaza frontal de acceso en el cual, la sensación de llegada por medio de vegetación endémica se vuelve una experiencia diferente al momento de ingresar.